La CGT se mostró a favor de debatir una reforma laboral, aunque pidió que sea consensuada

El bloque “Perspectiva sindical en una Argentina viable” dentro de Summit de AmCham, el evento de negocios que año a año organiza la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina, tuvo ayer a dos referentes de la CGT, Héctor Daer, y Andrés Rodríguez, como representantes del sector gremial. Ambos dirigentes se mostraron abiertos a discutir una reforma laboral, aunque reforzaron su pedido para que los cambios fueran “consensuados”.

“Estoy de acuerdo [con] que hay que reformular cosas”, sostuvo Daer ante la consulta sobre la viabilidad de una reforma laboral, el tema sobre el cual los empresarios esperan indicios. “No estoy de acuerdo ni con algunos aspectos que atacaron directamente las posibilidades de acción colectiva. las posibilidades de sustento de las organizaciones sindicales, y mucho menos estoy de acuerdo con –lo voy a nombrar porque es publico– con Federico Sturzenegger, que no solo ha repartido audios, y lo ha dicho en una conferencia en Estados Unidos, que hay que destruir los sindicatos”, distinguió. “Para sacarnos los prejuicios tenemos que entender que el equilibrio en la sociedad viene por parte de los sindicatos”, sumó uno de los integrantes del triunvirato de mando de la CGT.

La CGT judicializó el capítulo IV del Decreto de Necesidad y Urgencia 70/23 y logró frenar así las medidas vinculados a la legislación laboral. El caso está en la Corte Suprema.

“No tenemos ningún problema en consensuar la reforma laboral”, dijo a su tiempo, Andrés Rodríguez, y despertó la única ola de aplausos –tibia– por parte de los empresarios. “La actitud de cambio está en nosotros”, subrayó el dirigente estatal. “Ahora, una cuestión es cambiar de acuerdo a modalidades laborales y de acuerdo a una coyuntura determinada histórica, y otra cosa es intentar atacar la estructura sindical”, comparó el jefe de la UPCN.

La reforma laboral, uno de los puntos que integra la convocatoria que el presidente Javier MIlei hizo a los mandatarios provinciales, ya había sobrevolado el encuentro en en el bloque de gobernadores. “¿Hay que hablar de una reforma laboral? Por supuesto”, afirmó unas horas antes el chubutense Ignacio Torres, quien mantuvo fuertes contrapuntos públicos con el Ejecutivo, pero que se mostró a favor de la iniciativa.

“Primero hay que desmitificar esta cuestión de que los dirigente sindicales o las estructuras sindicales somos enemigos de los empresarios. No hay empresas sin trabajadores sin trabajadores sin empresas. Nosotros podemos aggionarnos a tiempos que van cambiando. Lo hemos hecho a través de los convenios colectivos del trabajo”, Rodríguez.

“Se acordaron tarde”, dijo Daer con respecto a la reunión del Gobierno con los empresarios de alimentos. “Se acordaron tarde –insitió– cuando todas las góndolas están puestas con un dólar a 1300, 1400″.

“Y lo otro que tiene techo son los salarios”, acotó Rodríguez. “Porque los salarios vienen perdiendo con la inflación y nos ponen una pauta salarial en las negociaciones colectivas desde el gobierno que tampoco obedece a ‘La Libertad Avanza’. Si es libertad se tiene que negociar libremente”, remató.

Paros docentes

Al ser consultado por el moderador Alejandro Fantino sobre la posibilidad de declarar a la educación como un servicio esencial, Daer dejó una de las frases más ruidosas de la tarde. “La educación no es esencial ni en la OIT (Organización Internacional del Trabajo)”, sostuvo, despertando un murmullo en la audiencia. “En términos de derecho de huelga”, añadió, intentando despejarlo. Luego, volvió sobre el punto para terminar de aclararlo. “Para mi es esencial una muy buena educación como proyección de futuro”, afirmó.

“En realidad el que se olvidó de la educación es el propio Gobierno con los 10 puntos del pacto de Mayo que no la colocó. Tendría que haberla colocado como una de las prioridades”, intervino Rodríguez.

“Tenemos que tener un norte. Hoy el único norte es el equilibrio fiscal que es necesario pero no suficiente. Ni tampoco es necesario tener que hacerlo en la aceleración que se esta haciendo pagando un costo social”, cerró Daer.

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