Cómo es Balthazar, el restaurante de Nueva York que vetó a James Corden por su mal comportamiento

“James Corden es un comediante enormemente dotado, pero un pequeño cretino”, escribió Keith McNally, restauranter y dueño del famoso Balthazar, en su cuenta de Instagram junto a una imagen del comediante en cuestión.

En su publicación denunció severos malos tratos de Corden con los empleados del restaurante y lo describió como “el cliente más abusivo” en los 25 años años de historia del local.

Tras informar que le impediría el acceso al establecimiento de Soho, el hecho se viralizó en las redes sociales, donde comenzaron a aparecer otras acusaciones similares en contra de Corden. Finalmente, McNally relató que el comediante británico se disculpó en privado con él y su personal por lo que decidió levantar ese “veto”.

Cómo es Balthazar, el restaurante de la polémica

Balthazar es un restaurante icónico ubicado en pleno centro del barrio de SoHo, en Nueva York, específicamente en el 80 Spring St. Abrió sus puertas en 1997 y se presenta como una “brasserie francesa todo el día”, en referencia a la atmósfera cómoda y relajada que caracteriza a los cafés y restaurantes parisinos.

Los espejos antiguos, las bancas de madera y la iluminación cálida se suman para transportar a los comensales hasta Francia con cada plato. Los gabinetes en color rojo son las ubicaciones más solicitadas.

Keith Mcnally es el orgulloso propietario de Balthazar y esta no es su única sucursal. El restauranter es británico, pero vive en Nueva York desde 1975, cuando comenzó su camino en la gastronomía. Básicamente, haciendo de todo, desde desgranar ostras hasta limpiar y ayudar en varias cocinas diferentes. Su primer local lo abrió en 1980. Ahora posee más de 11 establecimientos, entre ellos, un Balthazar en Londres.

Así como el mobiliario y la decoración, el menú es de inspiración francesa y los conocedores culinarios saben que este lugar es popular por el brunch que sirve los fines de semana, aunque el servicio está disponible de mañana a noche todos los días.

Entre los platos del menú se destacan los escargots de Bourgogne, el filete tártaro, la pechuga de pato a la naranja y la sopa de cebolla gratinada. Además cuentan con variedad de ensaladas, sándwiches y hasta huevos benedictinos para el almuerzo.

La repostería de Balthazar también es uno de sus puntos fuertes, destacada por los críticos. En la carta de postres están varios conocidos de la cocina europea: pavlova, tarta de manzana con helado de vainilla, mousse de chocolate, tarta de limón, profiteroles y la clásica crème brûlée.

Los precios, por ejemplo, para la hora del brunch, oscilan entre los 30 y los 35 dólares por plato. El menú y el servicio de Balthazar le dieron acceso a la Guía Michelin, donde está recomendado, por lo que requiere reserva previa debido a la alta demanda.

El establecimiento ha recibido mucha publicidad gracias a su mención en series y películas. Por ello no es extraño que el lugar esté abarrotado. “En Balthazar todo el mundo se siente realmente bienvenido”, dijo el director adjunto Zouheir Louhaichy, en entrevista con el blog de la empresa Resy.

Louhaichy presume que el restaurante tiene las puertas abiertas para todo tipo de personas, pero recuerda a clientes frecuentes como Anna Wintour, una de las mujeres más poderosas de la industria de la moda. Entre las numerosas celebridades que los han visitado están Gregory Peck, Joe DiMaggio, Meryl Streep, Michael Jordan y Francis Ford Coppola.

Tras la polémica por la supuesta mala actitud de Corden, las redes sociales de Balthazar están repletas de mensajes, buena parte de ellos en apoyo a los trabajadores y en reclamo por la decisión revertida de vetarlo: “En este momento siento el mismo desprecio por James Corden y por el propietario del restaurante. ¡Qué ridículo giro en los acontecimientos!”, escribió uno de sus seguidores cuando se conoció la noticia

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